Definitivamente el fenómeno globalizante; que
no es más que la universalización del carácter hegemónico del Modo de
Producción Capitalista y la conquista definitiva del mundo, atenta
peligrosamente contra aquel viejo concepto de La Historia Regional y Local, que
busca dirigir la mirada; sin negar la importancia de las grandes
civilizaciones, hacía los acontecimientos más relacionados a nuestro entorno.
Solemos vivir en lugares sin que nos importen
sus orígenes y ni siquiera saber por que llevan ese nombre. Somos indiferentes
a todo ese río de saberes, vicisitudes, tropiezos e incluso, hazañas y pasajes
heroicos que van dando vida a los
pueblos. Y de los personajes ni se diga. Nuestros pueblos están llenas de
personajes quijotescos e increíbles. De hombres y mujeres que dejaron su huella
particular en la historia de su comunidad. Pero en la escuela se empeñan en que
nos aprendamos la historia de Grecia y del Nuevo Mundo, pero que dejemos correr
como a un río, toda esa enciclopedia de saberes y de acontecimientos que
ocurrieron en nuestros pueblos y caseríos.
Según algunos aportes importantes que han
hecho tanto Juan José Ramírez (Cronista del Estado Monagas), como La Maestra
Emira Requena (Hija Ilustre de El Furrial), el nombre de El Furrial tiene un
origen incierto. Se dice que por la zona vivió un indio (o indígena), llamado
“Forriar”. Se piensa que por allí devino el nombre. Otros opinan que la zona
era paso obligado de los viajeros (camino real), y que por allí amarraban las
bestias y que estas “retozaban y forriaban”, y que pudo de allí haberse
derivado el nombre de El Furrial.
En el año 1970 El Furrial celebró su
centenario, que de acuerdo a los antecedentes históricos, el pueblo fue
“fundado” (decimos fundado por establecer un hecho cronológico, pues, es
posible que su creación obedezca más a un hecho fortuito), fue el 26 de agosto
de 1.870.
La Junta Centenaria, para celebrar tal
acontecimiento, estuvo conformada de la siguiente manera; Adrián Cabello Cabello;
Presidente. Eleazar Madrid; Vice-Presidente. Germán Cordero; Secretario de
Organización. Cleofe Lanz Cermeño; Tesorero. Dr: José Israel Lanz; Secretario
de Cultura. Eleonel García; Primer Vocal. Ramón Aguilar; Segundo Vocal.
Para la fecha del centenario El Furrial fue
decretado como Capital del estado Monagas. Y conjuntamente con La Junta
Centenaria se nombró una Junta Honoraria, presidida por El gobernador del
Estado de la época, Dr: Rafael Solórzano Bruce y otras altas personalidades.
Así como un Comité Religioso y un Comité Asesor.
El Furrial, población ubicada al norte de la
ciudad de Maturín, fue creciendo poco a poco, sus familias; Paraguacuto,
Rendón, Cabello, Rondón, Cordero, Cermeño, Andrade, Requena, Alemán, Ramírez,
Idrogo, Guzmán, Canales, Jaramillo, Rodriguez, Rojas, Lemus, Aguilar, García,
Herrera, Tocuyo, Quiroz (y muchas otras familias que la memoria esconde).
Hoy el furrial venera al Sagrado Corazón de
Jesús y a La Rosa Mística, pero es justo recordar que tradicionalmente nuestra
fe religiosa acogió a La Cruz Aparecida como su Patrona. Aunque también es
importante decir que unos comerciantes de Portugal que establecieron negocios
en El Furrial “intentaron” sembrar la tradición de La Virgen de Fátima.
Los que hemos nacido en esos pueblos y
caseríos estamos obligados a rescatar nuestra memoria histórica y a mantener
vivos el legado de nuestros seres queridos y de esos hombres y mujeres que sin
ir a una universidad, en la mayoría de los casos, estaban llenos de sabiduría y
de convicción de cómo criar hombres de bien.
El petróleo, el llamado “estiércol del
diablo”, también ha dejado su huella en El Furrial. Para PDVSA El Furrial es
visto geológicamente, solo como un Campo Petrolero. Pero para sus hijos, es la
cuna, es el mejor pueblo del mundo.
Su cementerio es el mayor tesoro, espiritual
y arquitectónico del pueblo. Allí esta resumida la historia de los hombres y
mujeres que ha parido ese pueblo.
Para muchos de sus hijos la pobreza ha sido
la mejor escuela de vida que hemos tenido. Con unos maestros prodigiosos y
sabios, que no obstante a las carencias y necesidades, pero con severidad y
amor, fuimos guiados a otra perspectiva de vida.
El conocimiento de nuestra historia local, la
microhistoria como la llaman algunos, es vital para enriquecer nuestro amor por
la patria toda. Esa identidad es la que explica el apego a nuestro terruño y
esa especia de placer, o felicidad, o paz que se siente cuando de pronto sopla
una pequeña brisa y algún recuerdo nos atrapa, o un olor, o una anécdota, o un
viejo amigo, o una andanza de muchacho. Eso no tiene precio.
Arriba por estos días El Furrial, o
FurrialYork, como jocosamente dice Diosdado Cabello, a los 146 años de
existencia. Y hay por allí noticias buenas. Pronto tendrá un hospital; con
Terapia Intensiva, Sala de Parto, Hospitalización, etc, etc.
En estas líneas se me quedan ahogados muchos
nombres, cuentos, leyendas, chismes, anécdotas e infinidad de recuerdos que nos
mantienen ligados, cual cordón umbilical, a El Furrial nuestro de siempre.
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Entonces el York que le añaden no tiene ningún significado?
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