Así como El Che
hablaba del “Hombre Nuevo”, así también el proceso revolucionario,
paulatinamente, tiene que ir pariendo “Instituciones Nuevas”. Y es que
definitivamente esta concepción es algo que no está desligada de lo que
llamamos La Conciencia Revolucionaria; esa especie de guerrero que se empeña en
combatir a esos miles de enemigos que el capitalismo trae a escena con el único
fin de robarle la autonomía funcional a cada ser. Es la alienación que poco a
poco va adormeciendo el sentido critico del ser; la libertad de pensar, de
actuar, etc.
Así
ocurre con las instituciones. Poco a poco estas van quedando atrapadas en una
especie de inacción, ineficiencia y pérdida total de las perspectivas, en cuanto
a que las instituciones públicas, son servicios a través de los cuales el
Estado se presta para servir a la gente, al ciudadano.
Lo
que hoy ocurre en El Servicio Nacional Aduanero y Tributario (SENIAT), es un
ejemplo claro de eficiencia y compromiso revolucionario. Pues, El Seniat, hoy
bajo la conducción de José David Cabello Rondón, ha demostrado altos niveles de
eficiencia y sobre todo una claridad meridiana en cuanto al rol histórico que
debe jugar. Como es bien sabido por todos el mercado petrolero mundial está
sumergido en estos momentos en una cruenta crisis, que como dato irónico, no es
por escasez, sino por una sobre explotación que ha inundado los mercados. Lo
cierto es que esto ha impactado las economías, que como la venezolana, tiene
una marcada influencia de la venta del petróleo.
Desde
hace varios años el Seniat viene haciendo aportes importantes en el
funcionamiento del Ejecutivo Nacional. Es una institución estratégica en cuanto
a que sus recursos apoyan muchos programas sociales y muchas actividades que
sirven para el bienestar de la gente y de las comunidades.
Para este año 2015
al Seniat se le asignó la responsabilidad de aportar al Gasto Público 68,8% de
los recursos. Los cuales se obtienen a través del pago del ISLR, pago del IVA,
de las actividades aduaneras y otras rentas, que al final suman todas para el
bienestar social. Ya para el mes de septiembre de este año el Seniat ha
cumplido con creces, con la meta establecida para todo el año, la cual estaba
estimada en 364.000 millones de bolívares. Y se han recaudado hasta ahora más
de 752.000 millones de bolívares.
Ahora para este 2016, el gobierno nacional,
en una clara concepción revolucionaria, de apoyo al pueblo y a las clases
sociales más necesitadas (el concepto de pueblo entendido y definido bajo la
concepción marxista de la historia), y en un acertado empeño en profundizar el
papel que vienen jugando las Misiones Sociales; sin descuidar el comportamiento
del mercado petrolero, ha fijado el Presupuesto Nacional en una barril de
petróleo basado en 40 $ y le ha asignado al Seniat la histórica responsabilidad
de aportar al Gasto Público; Un Billón 207 mil 544 Millones de Bolívares. Esto
significa que el 77.9% de los recursos estimados para el presupuesto 2016 serán
por ingresos NO petroleros. Y este ha sido estimado (El Presupuesto Nacional),
en Un Billón 548 Mil 574 Millones de Bs. Y solo 216 mil 581 millones serán de
recursos petroleros.
Hay un dato sumamente importante. El
Gobierno Revolucionario que lidera Nicolás Maduro, no obstante de ser objeto de
ataques, de guerra económica, de contrabando de extracción y además de una
campaña mediática feroz que vende a Venezuela como un país en crisis, con una
cruenta dictadura y sin democracia, se da el tupe de aumentar, para 2016, Las
Misiones y Planes Sociales en un 25% más que en el 2015. Es decir, que si en
este año se presupuestó 34.044 millones para Las Misiones y Planes Sociales,
para 2016 se han estimado 42.604 millones de Bs. Y es oportuno decir que cuando
hablamos de Misiones y Planes Sociales estamos hablando de Barrio Adentro,
Misión Alimentación, Madres del Barrio, Misión Sucre, Misión Negra Hipólita,
Misión Robinsón, Misión Niño Simón, Misión Identidad, Misión Barrio Nuevo
Barrio Tricolor, Fundación Niños, Niñas y Adolescentes, etc.
El legado que nos dejó El Comandante Chávez;
toda esta visión y esta concepción, revolucionaria e irreverente por lo demás,
es un gobierno modelo para las democracias del mundo. Pues, aquí se trata al
hombre como ser humano, no como una estadística o un simple número. Por eso el
Seniat es vanguardia, por que su eficiencia funcional le da respaldo al proceso
revolucionario. Y es oportuno robarle nuevamente una frase que alguna vez dijo
Diosdado Cabello y que se hace oportuna para esta hora; “sino nos dejan soñar,
no los dejaremos dormir”
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